domingo, 9 de octubre de 2011

El juego como herramienta

Nuestros hijos nos preguntan constantemente cómo actuar frente a distintas situaciones de la vida. El juego es una de las mejores herramientas para desarrollar el sentido de la ética. 
Desde chiquitos, los niños nos plantean dilemas que tienen que ver con la ética. Muchas veces, apurados o por no saber qué contestar, les devolvemos palabras vacías. Hoy, dicen que la mejor manera de enseñar valores a los chicos es a través del juego. A través del juego, se reconocen derechos y deberes, toleramos y apreciamos la verdad, la justicia y la libertad. Y también respetamos la diversidad. 
Muchas veces los chicos se aburren. Cuando están con amigos no saben qué hacer, en especial cuando hay más tiempo libre, en vacaciones. En otras ocasiones, nosotros no sabemos cómo entrar en temas más profundos con ellos. En esos casos, resulta muy enriquecedor jugar reflexionando.
Convivir supone, a veces, entrar en conflicto con las necesidades y los deseos de los demás, y el juego es bueno para guiarlos en la toma de decisiones.

¿Cómo enseñar valores?

La construcción de una conciencia moral individual, y de una vida interior valiosa, se alcanza con más facilidad por medio de lo siguiente:
·    El ejemplo: Modelos de valores en acción.
·    La discusión: La exploración y discusión de valores, de temas y de problemas morales.
·    El aliento: El apoyo para pensar y actuar de manera correcta.

¿Por qué es bueno jugar?

Porque a través del juego:
·    Resolvemos conflictos 
·    Discernimos juntos 
·    Transformamos reglas 
·    Aprendemos de lo distinto 
·    Recreamos gestos vitales 
·    Promovemos normas humanas 
·    Emprendemos decisiones creativas 
·    Desarrollamos el sentido crítico 
·    Buscamos la libertad 
·    Toleramos 
·    Reconocemos derechos y deberes